Las sorpresas continúan y hoy al llegar a clase encontramos dos paquetes procedentes de León; nos los envía JESÚS CALLEJA!!!!! Que bien y que nervios por saber que hay dentro.
"Serán unas botas para que podamos ir al Polo Norte"
O "algo que nos virva para explorar"
Abrimos la caja mas grande y nos encontramos con esto, unos botes de cristal. ¿Pero porqué nos envía esto?. No entendemos nada.
Abrimos entonces el segundo paquete y encontramos un bote de pimientos asados. En la etiqueta leemos que son pimientos de Fresno de la Vega; empezamos a entender algo.
Al rato llegan a clase nuestros compañeros de cuatro años con una caja llena de pimientos, que también les ha enviado Jesús Calleja. Claro, es que su pueblo es famoso por los PIMIENTOS. Así que después de ver todo junto y pensar mucho llegamos a la conclusión que todo era para que nosotros preparásemos pimientos asados y los envasásemos. ¡Menuda tarea!
Bajamos a la cocina y con mucha educación le pedimos a María, la cocinera, que si por favor nos podía asar los pimientos. Le contamos toda las historia y cual fue nuestra sorpresa al contarnos que ella tenía una casa cerca de Fresno de la Vega, que iba muchas veces a allí y que le encantaban los pimientos. Nos dijo que si, que por supuesto que los asaba. Le dimos las gracias y un super abrazooooo.
Mas tarde, en el taller de experiencias, nos pusimos los mandiles, nos remangamos y ¡a trabajar!. Primero pelamos los pimientos con mucho cuidado.
Después los cortamos y los metimos en los botes.
Para finalizar limpiamos los botes, los cerramos bien y pegamos la etiqueta que previamente habíamos preparado.
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