Hoy nos vino a visitar la mamá de Álvaro, es anestesista en el Hospital de Jarrio. Al entrar ya nos llamó la atención porque venía vestida con el uniforme que utiliza cuando está en el quirófano.
Nos fuimos escuchando el corazón con el FONENDOSCOPIO. Escuchamos el nuestro y el de nuestros amigos.
Muy calladitos, y con mucha concentración esperábamos atentos a escuchar los latidos. Cuando los oíamos se nos cambiaba la cara.
Luego nos fue contando como es su trabajo y nos dimos cuenta de lo importante que es su labor. Ella es la encargada de dormir a las personas que se a operar; les pone un fármaco para dormirlos y cuando acaba la operación les pone otro para despertarse. Cuando es así, el medicamento se lo ponen en una vena. Otras veces no los duermen del todo, solo una parte para que no tengan dolor.
Después llegó el turno de contar experiencias propias con heridas, visitas al hospital, puntos, abuelos, abuelas y papás que se operaron y que anestesiaron. Y por supuesto preguntas, muchas preguntas.
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Gracias, muchas gracias por venir y mostrarnos tu trabajo. Algunos queremos ser médicos jijij.
Y por su puesto no se podía ir sin el mejor de los regalos nuestro SUPERABRAZO.
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